Diez canciones para la caída de un imperio.
Maruan Soto Antaki
@_Maruan
Sería casi perverso, imaginar a Julio César dando la orden de incendiar la biblioteca de Alejandría mientras un grupo de músicos toca a sus espaldas, al estilo de las Big Band. Algo pornográfico, por no decir ridículo, hacerlo con la imagen de Aureliano, saqueando esa misma ciudad al ritmo de bachata en el siglo III. De pésimo gusto sería acompañar con un par de trombones la muerte de Alejandro el Grande en Babilonia.
El derrumbe de los imperios no solo ocurre en lo obvio, hay imperios de la razón y del sinsentido, épocas loables que se acaban por la bestialidad y otras despreciables, por la fortuna. Son los instantes de cambio, momentos donde la cosa se quiebra y toca pensar qué vendrá. Los de mi generación recordamos la caída del comunismo europeo, la cercanía con la historia nos podrá llevar a la entrada de De Gaulle a París. Envueltos en el romanticismo pensaremos que la Cuba de los Castro, anunció su claudicación hace nada e incluso ahí, cuando al asunto aún le falta, existen canciones que en un ejercicio wagneriano anunciarían la debacle.
Son aquellos instantes, a veces tragedias, que han sacado lo mejor y peor de nosotros. La Guerra Civil española, la muerte de Franco, la dictadura de Pinochet, de Videla. El Apartheid, la guerra de los Balcanes, el establecimiento de la Autoridad Nacional Palestina, la reinstalación de relaciones diplomáticas entre Cuba y Estados Unidos y claro, la caída del Muro de Berlín. Recordando todos estos.
1. La Internacional. (En versión de la película, Tierra y Libertad, de Ken Loach)
2. A cara o cruz. Radio Futura
3. 1977. Ana Tijoux
4. Mejor no hablar de ciertas cosas. Sumo.
5. 1984. David Bowie
6. Biko. Peter Gabriel
7. Kalashninov. Goran Bregovic
8. Political Fuck. Balkan Beat Box
9. El Aldeano, AL2
10. Y para quitar lo entrañable de las anteriores, aquel plomo hilarante de David Haselhoff, cantando Looking for freedom durante el concierto de 1989 en la Puerta de Brandemburgo.
Maruan Soto Antaki nació en la Ciudad de México en 1976. Colabora con distintos medios tratando temas relacionados con cultura, política internacional y medio oriente, zona del mundo con la que mantiene un estrecha relación. Autor de Casa Damasco (Alfaguara, 2013). Su novela más reciente es La carta del verdugo (Alfaguara). Tiene una columna en SinEmbargo.
